La canaloplastia AB interna es un procedimiento quirúrgico moderno y eficaz para prevenir el daño permanente al nervio óptico y la pérdida de visión como consecuencias del glaucoma.
Es una técnica mínimamente invasiva que tiene como principal objetivo reducir la presión intraocular para proteger el nervio óptico. Se realiza una incisión del diámetro de un cabello insertando el Microcatéter en el canal de drenaje natural del ojo para ampliarlo, lo que reducirá la Presión Intraocular (PIO) y frenará la pérdida de visión.Es importante destacar que para poder optar por este procedimiento debe ser evaluado por un oftalmólogo especialista en glaucoma.
En Oftalmosalud contamos con una unidad de alta complejidad conformada por los más reconocidos especialistas en glaucoma del Perú equipados con los más modernos instrumentos de diagnóstico y tratamiento. Conoce más sobre esta avanzada operación de glaucoma reservando tu cita aquío continúa leyendo y cuida tu salud visual con nuestras recomendaciones.
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La canaloplastia de glaucoma es un procedimiento quirúrgico que debe ser realizado en un hospital o clínica especializada en oftalmología. A continuación, describiremos brevemente el procedimiento de la canaloplastia:
ANESTESIA
El paciente es sedado y se le administra anestesia local para adormecer el ojo y la zona alrededor del mismo.
INCISIÓN
El oftalmólogo hace una pequeña incisión en la esclera (la capa exterior del ojo) cerca de la córnea para permitir el acceso al canal de Schlemm.
MICROCATHETER
Se introduce un microcatheter en el canal de Schlemm a través de la incisión, y se guía a lo largo del canal de drenaje para crear una abertura más amplia. Se utiliza una solución salina para hidratar y expandir el canal facilitando el paso del microcatheter.
SUTURA
Una vez que se ha ampliado el canal de Schlemm, se inserta un hilo de sutura especial en el canal y se lo guía alrededor del ojo. Luego se cierra la incisión y se aplica un apósito en el ojo.
POST OPERATORIO
Después de la cirugía, se suele colocar un parche en el ojo para protegerlo durante varios días. El oftalmólogo programará citas de seguimiento para verificar la presión intraocular y asegurarse de que el ojo se esté curando correctamente.
Idealmente, los pacientes candidatos a una canaloplastia AB interno deben presentar glaucoma en estadios iniciales o moderados, aunque también puede ser una opción en pacientes con glaucoma avanzado que no puedan someterse a otras técnicas quirúrgicas debido a factores como la edad avanzada o problemas de salud concurrentes.
Sin embargo, la elegibilidad de un paciente para una canaloplastia AB interno debe ser determinada por un oftalmólogo especialista en glaucoma después de realizar una evaluación exhaustiva de la salud ocular del paciente, incluyendo la medida de la presión intraocular, la evaluación de la anatomía ocular y la salud del nervio óptico.
Idealmente, los pacientes candidatos a una canaloplastia AB interno deben presentar glaucoma en estadios iniciales o moderados, aunque también puede ser una opción en pacientes con glaucoma avanzado que no puedan someterse a otras técnicas quirúrgicas debido a factores como la edad avanzada o problemas de salud concurrentes.
Sin embargo, la elegibilidad de un paciente para una canaloplastia AB interno debe ser determinada por un oftalmólogo especialista en glaucoma después de realizar una evaluación exhaustiva de la salud ocular del paciente, incluyendo la medida de la presión intraocular, la evaluación de la anatomía ocular y la salud del nervio óptico.
Título del procedimiento
Visión borrosa, “nublada” y, en ocasiones, doble
Título del procedimiento
Visión borrosa, “nublada” y, en ocasiones, doble
Título del procedimiento
Visión borrosa, “nublada” y, en ocasiones, doble
Título del procedimiento
Visión borrosa, “nublada” y, en ocasiones, doble
La canaloplastia AB interno se realiza bajo anestesia local y es un procedimiento indoloro. Después del procedimiento, es posible sentir una leve molestia o presión en el ojo tratado, pero esto suele desaparecer en pocos días. En general, los pacientes experimentan poco o ningún dolor durante o después de la canaloplastia AB interno.
El tiempo de recuperación después de una canaloplastia AB interno puede variar de paciente a paciente, pero en general, se espera que la recuperación sea más rápida que con otros tipos de cirugía de glaucoma.
Después del procedimiento, es posible que necesite usar un vendaje durante algunas horas. La mayoría de los pacientes pueden volver a sus actividades normales en unas pocas semanas después de la cirugía.
Hay ciertos casos en los que una canaloplastia AB interno puede no ser adecuada. Las personas que no deberían someterse a una canaloplastia AB interno pueden incluir:
- Pacientes con glaucoma avanzado que no responden bien a otros tratamientos.
- Pacientes que tienen problemas graves de salud ocular además del glaucoma, como cataratas avanzadas o enfermedades retinianas.
- Pacientes que tienen antecedentes de reacciones alérgicas graves a medicamentos o anestesia.
- Pacientes con enfermedades sistémicas graves, como enfermedad cardiovascular, que pueden aumentar el riesgo de complicaciones.
Es importante hablar con un oftalmólogo experimentado para determinar si la canaloplastia AB interno es adecuada para su caso individual.
Los resultados de la canaloplastia AB interno pueden durar varios años. Algunos estudios han demostrado que el procedimiento puede reducir la presión intraocular en un 30-40% durante al menos dos años. El seguimiento regular con su oftalmólogo es importante para controlar la progresión del glaucoma y determinar si se necesitan tratamientos adicionales.