Más de 79 millones de personas sufrían de glaucoma en el 2020. De esta cifra, al menos un 10 % padecía de glaucoma de ángulo cerrado, y todavía se espera que estas cifras aumenten en los próximos años.
De hecho, sin considerar las diferencias entre el glaucoma de ángulo abierto y cerrado, el glaucoma es la primera causa mundial de ceguera irreversible. Así que es muy importante aprender a reconocerlo para poder tratarlo a tiempo.
En este artículo, te diremos qué es el glaucoma de ángulo cerrado, cuáles son los síntomas, implicaciones y posibles tratamientos.
INDICE DEL CONTENIDO
Es una condición ocular grave que ocurre cuando el líquido interno del ojo queda obstruido y no puede salir del ojo. Esta acción provoca una intensa presión en el interior del ojo que afecta el nervio óptico hasta provocar la pérdida de la visión.
A pesar de ser una afección seria, es tratable en etapas tempranas de la enfermedad. Si no se trata a tiempo, causará la pérdida total de la visión.
Hay muchas señales que nos acercan a la definición de glaucoma de ángulo cerrado, síntomas y tratamientos. Entre ellas, la diferencia entre glaucoma de ángulo abierto y cerrado:
| Ángulo cerrado | Ángulo Abierto | |
| Causa | Aumento de la presión dentro del ojo que bloquea el ángulo de drenado. | Drenaje ineficiente en la pared ubicada en el humor acuoso. |
| Riesgo de ceguera | Muy alto si no se trata temprano. | Medio riesgo si no se trata a tiempo. |
| Quién lo padece |
|
|
| A qué edad se detecta | A los 50 años con mayor frecuencia. | Mayores de 40 años. Más común en más de 60 años. |
Los síntomas comunes del glaucoma de ángulo cerrado aparecen de forma repentina y avanzan rápido. Son síntomas intensos y constantes que se reflejan como:
Las causas de glaucoma de ángulo cerrado crónico aparecen por una variedad de factores que provocan la obstrucción del ángulo de drenaje, entre ellas:
Debes tener en cuenta que también existen algunos medicamentos que causan glaucoma de ángulo cerrado. Estos son anticolinérgicos, esteroides orales, antihistamínicos, diuréticos de asa o agonista y adrenérgicos.
Es importante conocer los riesgos que provocan ciertos medicamentos para tener una vigilancia adecuada. Así es posible prevenir los ataques agudos y manejar el glaucoma de forma efectiva.
Los tipos de glaucoma de ángulo cerrado se clasifican según su ritmo de desarrollo y su presentación clínica. Estos son los tipos de glaucoma primario de ángulo cerrado:
El glaucoma agudo de ángulo cerrado se caracteriza por el aumento severo de la presión intraocular.
Se cataloga como urgencia y requiere atención médica inmediata.
Esto sucede porque el iris y la córnea se cierran de manera abrupta. De esta manera, se bloquea el flujo de humor acuoso y causa un aumento rápido de la presión intraocular.
Se reconoce por un dolor ocular intenso, náuseas, vómitos, visión borrosa y, en algunos casos, ojos rojos y córnea turbia.
El glaucoma crónico de ángulo cerrado se desarrolla más lento. A diferencia del anterior, no presenta síntomas evidentes hasta que está muy avanzado.
Sus indicadores se observan durante un examen ocular habitual, por lo que es crucial acudir regularmente a un chequeo oftalmológico.
Este tipo de glaucoma aumenta de forma gradual, y algunas personas son asintomáticas hasta que la presión en el ojo es muy alta y causa un daño al nervio óptico.
En realidad, cualquier persona puede desarrollar esta enfermedad. No obstante, hay algunos factores que parecen incrementar la incidencia en algunos casos.
Tienen más posibilidad de desarrollar este tipo de glaucoma quienes tienen:
Solo un médico oftalmólogo experto diagnostica si tienes este tipo de glaucoma. Para el diagnóstico de glaucoma de ángulo cerrado, se debe ver el fondo de ojo y determinar si se encuentra cerrado o no.
En todos los casos, se debe evaluar con precisión si existe una clase de presión del nervio óptico y cómo se percibe el campo visual. Asimismo, el médico mirará la historia clínica y evaluará los síntomas.
En lo sucesivo, el médico solicitará algunos exámenes que debes practicarte con celeridad como:
Debes saber que el glaucoma de ángulo cerrado tiene cura solo si es tratado a tiempo. Por esta razón, si tienes alguno de los síntomas que describimos y tienes factores de riesgo, es mejor que acudas a un oftalmólogo.
Entre los diferentes tratamientos, existen gotas para glaucoma de ángulo cerrado, así como cirugía para reducir la presión sobre el nervio ocular. Vamos a detallarlos:
Dependiendo del avance de la enfermedad, el oftalmólogo puede recetar algunos medicamentos para glaucoma de ángulo cerrado como:
Cuando los tratamientos no ofrecen resultados, se considera que debe hacerse una cirugía de glaucoma de ángulo cerrado. Entre los procedimientos quirúrgicos, el oftalmólogo puede considerar:
Debes saber que necesitas recibir tratamiento para glaucoma de ángulo cerrado cuanto antes. Esto quiere decir que debes entrar en contacto con un médico oftalmólogo para decidir tus opciones, ya sea medicamento o cirugía.
Entre las características más comunes de este tipo de pacientes, suelen apreciar halos o anillos cuando hay fuentes de iluminación directa. También tener visión borrosa cuando hay poca luz o los objetos están a largas distancias.
Si se detecta a tiempo, el tratamiento adecuado reducirá la presión que surge en el ojo. Por ello, es indispensable la ayuda inmediata de un especialista.
Si tienes sospechas de que padeces glaucoma de ángulo cerrado, lo mejor es solicitar una consulta oftalmológica en Clínica OftalmoSalud. Nuestros expertos te atenderán y te ayudarán a sopesar tus opciones para recibir el tratamiento que necesitas. ¡Te esperamos en cualquiera de nuestras sedes!
