La visión borrosa repentina es un problema ocular muy común y, en muchos casos, no es un síntoma que amerite mucha preocupación. De todas formas, cuidar la salud de nuestros ojos es esencial porque contribuye a una mejor calidad de vida, sin importar la situación que enfrentemos.

En este artículo profundizaremos sobre el concepto y, además, te indicaremos las principales causas y acciones que puedes hacer para tratar una visión borrosa repentina. ¡Comencemos!

¿Qué hacer si tienes visión borrosa repentina?

Cuando experimentas visión borrosa, ya sea en uno o ambos ojos, puede deberse a defectos refractivos como la miopía, la hipermetropía, el astigmatismo o la presbicia.

Asimismo, dicho problema puede presentarse de manera repentina y puede durar un corto periodo de tiempo debido a causas de una fatiga visual o algún elemento extraño que entró al ojo como el polvo.

De todas formas, tras sufrir de una visión borrosa, lo más pertinente es acudir a un especialista en oftalmología. Esto es porque no es lo mismo sentir un oscurecimiento de imagen que ver un poco borroso.

En ese sentido, el especialista deberá hacer un examen, donde puede añadir pruebas como la de fondo de ojo, tonometría, entre otras acciones para identificar el problema.

Principales causas de la visión borrosa repentina

En el caso de que dicha alteración de la vista aparezca de la nada en un breve periodo de tiempo, posiblemente se deba a algunos de los siguientes escenarios:

Fatiga o sequedad ocular

Una visión borrosa normalmente sucede cuando pasas mucho tiempo con la mirada fija en una pantalla, libro o tarea manual. Asimismo, cuando recién te levantas, suceden casos en que la película lagrimal no es la correcta y el ojo se ha secado un poco, provocando que no puedas ver bien.

Migraña

Este malestar puede provocar ciertos problemas oculares, entre ellos, una visión borrosa repentina. Es posible que el afectado vea destellos luminosos que provienen del mismo dolor de cabeza.

Espasmo de acomodación

El espasmo de acomodación o “falsa miopía” es un problema ocular que sucede luego de una contracción del músculo ciliar (provocando un exceso de acomodación que no logra ajustarse a la necesidad visual de la persona).

Como consecuencia, existe un problema de miopía de origen acomodativo acompañado de una visión borrosa y, en ciertos casos, hasta de cefaleas.

Estilo de vida y factores ambientales

La falta de sueño, tener un déficit de vitaminas, estar en sitios con mucha exposición al humo del cigarrillo, luz, polvo, aire acondicionado, calefacción, exceso de rayos solares o viento, son factores que pueden causar la visión borrosa repentina.

Lesiones en la córnea

Puede tratarse de una abrasión o una úlcera corneal que son provocadas cuando un elemento indeseado entra en el ojo, como por ejemplo, el polvo o la arena.

Miodesopsias o ‘moscas volantes’

Se tratan de “manchas oscuras móviles” que suelen aparecer en nuestro campo de la visión y se relacionan mucho a un proceso de envejecimiento. Conforme pasan los años, el gel vítreo se va deteriorando, provocando que se desprendan microscópicos trozos de tejido que flotan dentro del ojo y son conocidos como “moscas volantes”.

Glaucoma agudo

También es conocido como glaucoma de ángulo cerrado. Este problema se crea debido a la elevación de la presión intraocular (PIO), provocando una obstrucción en el sistema de drenaje. El glaucoma agudo es poco usual. Asimismo, debe ser tratado de forma inmediata en caso de padecerlo.

Problemas vasculares en el nervio óptico y la retina

La visión borrosa repentina también puede ser provocada por la falta de riego sanguíneo que termina afectando negativamente el nervio óptico, llegando a casos de atrofiamientos.

Asimismo, el deterioro de las venas de la reina también puede manifestarse como visión borrosa o pérdida de visión repentina en todo el ojo.

Colirios y medicamentos

Ciertos medicamentos o colirios tienen efectos secundarios que podrían provocar que la visión de una persona sea borrosa de forma temporal.

Cambios hormonales durante el embarazo

El cambio hormonal que una mujer atraviesa durante el embarazo puede alterar la forma y el grosor de la córnea causando así, una visión borrosa repentina.

Asimismo, es normal que una mujer embarazada presente sequedad ocular. Por ello, independientemente del caso, lo mejor es hacer una consulta con el médico especialista en los trastornos oculares porque podría ser una señal de algo más serio como hipertensión o diabetes gestacional.

¿Cómo prevenir la visión borrosa repentina?

Si se deja de lado los factores “edad” o “características individuales”, en la actualidad podemos tomar medidas preventivas para la visión borrosa repentina como las indicadas a continuación:

  • Visita al oftalmólogo: es importante que adoptes el hábito de ir con un médico especialista en oftalmología por lo menos una vez al año o con mayor frecuencia. Si sientes molestias o presentas alguna enfermedad ocular (o no), siempre es bueno tomar recomendaciones de un experto y prevenir posibles problemas a futuro.
  • Gafas: el uso de gafas es ideal para corregir defectos visuales en momentos necesarios. Por ejemplo, si vas al exterior y notas mucha iluminación natural, podrías optar por unas gafas de sol con los filtros correctos; así estarás protegiéndote de la radiación ultravioleta.
  • Lentes de contacto: el uso de lentes de contacto también son recomendados para evitar la aparición de la visión borrosa. Por supuesto, antes de usarlos, es necesario que acudas con tu oftalmólogo de confianza para ser evaluado y debes seguir los consejos de uso e higiene.
  • Dieta saludable: la alimentación balanceada aporta ricos nutrientes, algunos de ellos como la vitamina A, E y C, ayudan a combatir y prevenir enfermedades de los ojos.
  • Descanso: definitivamente dormir las horas recomendadas es una forma eficaz de evitar la visión borrosa repentina. Asimismo, realizar pequeños descansos de 10 a 15 minutos cada hora durante jornadas laborales también te ayudará a evitar esta patología.
  • Evita el estrés: intenta prevenir el estrés y tomar medidas para afrontarlas adecuadamente. Puedes distraerte un poco y dejar lo que estabas haciendo para buscar un momento de relajación.
  • Ejercicio físico: el simple hecho de caminar o correr todos los días por 30 minutos como mínimo, le otorgará beneficios a tu cuerpo y mente.
  • Entrenamiento visual: el entrenamiento visual puedes hacerlo durante unos pocos minutos al día. Esto te ayudará a mejorar significativamente tu salud ocular. Por ejemplo, existe el yoga ocular, una actividad que está enfocada en eliminar tensiones, ayudar a la tonificación muscular y mejorar la irrigación sanguínea del ojo para recuperar su agudeza visual.

Si has presentado visión borrosa repentina o tienes algún problema ocular, solicita de inmediato una consulta oftalmológica. Reserva tu cita médica online en OftalmoSalud o contáctanos a través de nuestro chat de WhatsApp. ¡Te esperamos!

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