Los errores refractivos del ojo evitan que la luz que atraviesa las estructuras oculares se enfoque de forma correcta en la mácula de la retina, ocasionando distorsión en las imágenes que se ven.
Hay que recordar que la visión se produce cuando el cristalino y la córnea desvían o refractan los rayos de luz que penetran el ojo para que se enfoquen en la mácula de la retina. A su vez, la mácula transforma dicha luz en impulsos eléctricos enviados al cerebro por medio del nervio óptico, quien los convierte en las imágenes que observas.
Ahora bien, cuando existen defectos en la forma del ojo, un globo ocular más largo o más corto o deterioro en el cristalino se crean problemas visuales que dificultan ver bien.
En este artículo te explicaremos todos los errores refractivos del ojo que existen, cómo puedes identificarlos por sus síntomas y cuáles son sus tratamientos más comunes.
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Los errores de refracción son defectos visuales que dificultan ver con claridad y nitidez. Se presentan cuando existen anomalías en la forma del ojo que evitan enfocar adecuadamente la luz en la retina.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el mundo existen más de 2.200 millones de personas con errores refractivos no corregidos, de los cuales 1.000 millones de estos pacientes pudieron haberlos evitado. Esto es un ejemplo de su gran impacto en la población mundial.
Existen cinco tipos de errores de refracción que afectan a las personas. Conoce cuáles son y qué efecto tienen en los ojos.
Es un error refractivo que hace que la visión sea borrosa y distorsionada, y se presenta cuando existe una anomalía en la forma de la córnea y/o el cristalino.
De hecho, un paciente con astigmatismo puede tener dificultad para ver objetos lejanos y cercanos por igual.
La hipermetropía o hiperopía es un error refractivo visual que ocasiona que los objetos que están cerca de la vista se vean borrosos.
Esta afección ocular aparece cuando el ojo cambia su forma y hace que la luz no se enfoque en la mácula de la retina (al frente), sino en la parte de atrás.
Es lo contrario a la hipermetropía, ya que hace que los objetos lejanos se vean borrosos y ocurre porque la luz que entra al ojo se enfoca en una zona ubicada enfrente de la retina y no en la propia retina.
También conocida como “ojo vago”, la presbicia es un error refractivo residual que hace que las personas tengan dificultad para ver las cosas de cerca.
Se produce porque el cristalino pierde la capacidad de enfocar de forma adecuada la luz en la retina.
Este es un tipo de error refractivo que se presenta en pacientes que carecen de cristalino en el ojo, bien sea por un problema congénito, una lesión o por una extracción de catarata.
Es por ello que, cuando a un paciente se le extrae la catarata, se le implanta un lente intraocular que evite la aparición de este error de refracción.
El síntoma más común de todos los problemas refractivos mencionados es la visión borrosa. Otros síntomas habituales son:
Es necesario mencionar que algunas personas podrían no sentir ningún síntoma de errores refractivos del ojo, por lo que es indispensable acudir con regularidad al oftalmólogo para una revisión de rutina.
Por otro lado, hay pacientes que, aunque tengan lentes de contacto o anteojos, sienten que, pasados los meses, los síntomas de problemas refractivos vuelven.
Si ese es tu caso, esto indica que la medida del lente ha cambiado y que tienes que acudir al especialista para recibir una nueva medida.
Existen diferentes causas por las cuales se puede desarrollar problemas refractivos de la visión. Algunas de estas son:
Si has presentado visión borrosa o cambios en tu visión, debes acudir de inmediato al oftalmólogo para una revisión completa.
Para hacer el diagnóstico de algunos de los defectos de refracción en el ojo, es probable que el médico realice los siguientes exámenes:
Con estos exámenes visuales, el oftalmólogo determinará cuál de los errores refractivos del ojo padeces según el problema de retina que presentes, así como qué tratamiento debes seguir para su corrección.
Existen diferentes tratamientos para corregir los errores refractivos del ojo, como el uso de anteojos, lentes de contacto o cirugía refractiva. A continuación, te contamos en qué casos se recomienda cada tratamiento.
Cuando el problema de miopía, presbicia o astigmatismo es leve, es frecuente ver que los médicos oftalmólogos recomienden el uso de anteojos al paciente.
De hecho, hay ocasiones en las que les recomiendan utilizar bifocales, para mejorar la visión lejana y cercana a la vez.
Los anteojos se recetarán según una medida adecuada para mejorar la visión de cada paciente.
Cuando el paciente no quiere utilizar anteojos porque siente que afecta su estética o le impide desarrollar sus labores con normalidad, la opción ideal son los lentes de contacto.
Siguen el mismo principio en cuanto a que se recomienda para pacientes con defectos de refracción leves y bajo una fórmula personalizada.
Por supuesto, requieren de mayor cuidado e higiene, ya que están en contacto directo con la superficie del ojo.
La cirugía ocular con láser corrige los problemas de refracción graves y solo el médico puede recomendar si debe utilizarse o no.
La cirugía refractiva que se aplica en OftalmoSalud utiliza un láser de alta frecuencia para crear Flaps totalmente personalizados y precisos. De esta manera, se logra una cirugía segura y libre de dolor para el paciente.
Algunos de los cuidados que puedes incluir en tu día a día para evitar sufrir de problemas refractivos son:
Y la mejor forma de prevenir errores refractivos del ojo es acudir al oftalmólogo con regularidad. En OftalmoSalud nos preocupamos por tu salud visual, por ello te recomendamos agendar una consulta oftalmológica. Reserva tu cita médica y nuestros expertos analizarán la condición de tu vista para evitarte problemas mayores.